Esta magnífica fotografía de nuestro Archivo que fue tomada un 23 de diciembre de 1938 muestra a la Plaza Mitre de San Isidro en todo su esplendor y en el centro de la imágen al Reloj Floral.
La historia nos cuenta que allá por 1913, el entonces intendente de San Isidro Adrián Beccar Varela fue el impulsor de la construcción del reloj Floral, luego de recibir una postal con la foto del reloj floral de Edimburgo, Escocia.
Le encargó a José Testorelli la creación de un Reloj Floral para engalanar un espacio de la Plaza Mitre. Este relojero suizo, radicado en San Isidro desde 1887, y su hijo fueron los que pusieron en marcha al famoso reloj el 31 de diciembre de 1913 a la medianoche. El primer reloj floral de la Argentina y de Sudamérica.
Al principio tenía una enorme cuerda de bronce y hierro de origen francés que era accionada dos veces por semana. Luego se la cambió por un mecanismo eléctrico.
Si bien el reloj floral tuvo su época de esplendor, permaneció fuera de uso durante varios años hasta que en el 2013 fue reparado y reacondicionado para que festejara sus primeros 100 años de vida en pleno funcionamiento.