Aquí tienes un buen lugar para explorar la ciudad. Las habitaciones vienen con baño propio, una ducha genial y todos los servicios necesarios. ¡Ideal para una estancia cómoda y conveniente! 🛁

Las habitaciones estaban bien cuidadas y de buen tamaño. Las camas eran cómodas. - La vista desde la habitación era increíble. - Las instalaciones del hotel eran buenas. - La ubicación era conveniente, cerca del metro y de un supermercado.

Ubicación pintoresca, desayuno muy bueno y personal absolutamente increíble.

Había una cama no tan buena en mi habitación.

Ubicación excelente, personal acogedor, habitación de un buen tamaño y hotel muy limpio. Había un microondas, una nevera y también instalaciones de café en la habitación, me ha encantado todo. El barrio Queens definitivamente merece ser explorado.

Todos eran serviciales.

Estábamos encantados de encontrar unas habitaciones bien cuidadas y nuevas en este hotel. La comida estaba fresca. El lugar era cómodo, justo al lado de una estación de metro, también del centro de la ciudad, y la vista era asombrosa. Durante nuestra estancia visitamos el Museo de la Imagen en Movimiento que estaba a 15 minutos andando.

correcta atención ,buena ubicación respecto a medios de transporte. estamos satisfechos con el resultado de nuestra estadia.

El personal de este lugar es muy amigable y complaciente.

Las instalaciones son adecuadas. las habitaciones son grandes y cómodas, así como el baño. Está a 2 minutos de una parada de metro y 30 minutos a pie de Manhattan. El servicio de wi-fi funciona muy bien.

Nadie del personal habla español. Con un inglés básico te puedes apañar para asuntos sencillos, pero si quieres tratar algún tema más complejo es difícil. El comedor es pequeño en relación con el número de habitaciones

Vistas increibles del Sky Line de Manhattan

Este lugar tiene una excelente ubicación cerca del mercado local, estaciones de metro, restaurantes y el centro.

La ubicación es muy buena, a solo 1 cuadra y media de la estación Queensboro Plaza del metro, con buenos accesos y en un barrio tranquilo. El desayuno era suficiente (café variado, donuts, cereal, lecha, jugo y poco más).

La habitación no tenía caja fuerte.

Me ha gustado la ubicación, espectacular para moverse en metro y estar en Manhattan en 5 minutos, la relación calidad/precio, la limpieza, las habitaciones muy cómodas.

El espacio para el desayuno es demasiado pequeño, hay que hacer cola para conseguir lugar, se pierde mucho tiempo

Este lugar tiene una ubicación perfecta cerca de las principales atracciones, una estación de tren y del aeropuerto, además de estar cerca del Queensbridge Park.

- La cercanía a Manhattan. En tan solo 10- 15 minutos estabas en la parada de Times Square. Hay un montón de líneas de metro que te llevan al centro y la parada de metro está a poca distancia del hotel (se ve desde la puerta). - Las habitaciones son amplias, cómodas y completas. Sobre todo destacar la cama, que es inmensa y comodísima. El baño tiene bañera, es amplio y completo con todo lo necesario (secador, etc). - Limpieza correcta. - Desayuno incluido. - Puedes guardar las maletas hasta que salga el avión en un rincón al lado de la recepción. En un primer momento no parece nada seguro (las maletas quedan un poco en medio del Hall), pero todo el mundo las guarda allí y por experiencia propia, no hay ningún problema.

- Desayuno. Poco variado y demasiado calórico, pero vamos, es la tónica de la alimentación neoyorkina. A destacar también la lentitud en reponer las cosas que se iban gastando... el último día en concreto no pudimos coger danones dado que no repusieron en los tres cuartos de hora que estuvimos allí desayunando. - El personal de recepción no habla español. Pero con unas nociones básicas de inglés, es fácil aclararse. - Personal de recepción poco atento y poco servicial, pero correcto en las cuestiones básicas.