En poco más de un año el Tottenham ha pasado de jugar una final de Champions... a tener que conformarse con disputar la Europa League. Y gracias.
El empate contra el Crystal Palace (1-1), unido a la derrota del Wolverhampton frente al Chelsea (2-0), otorgó a los 'Spurs' (59 puntos) la sexta plaza en función del 'golaverage' general, principal criterio de desempate en la Premier: +14 frente a +11. Es cierto que, si el Chelsea gana la final de la FA Cup al Arsenal, el séptimo, en este caso los Wolves (59 puntos), también disputarán la Europa League 'vía Liga'.
El gol de Kane contra un Palace que venía de encajar siete derrotas seguidas vale su peso en oro. El 'killer' del Tottenham recibió de Lo Celso y batió a Guaita con un tiro raso ajustado al palo en el 13'. Se le ve en forma tras la lesión: ha marcado cinco goles en los tres últimos partidos.
Pero los 'Spurs', que no conocen la felicidad plena esta temporada, se tuvieron que conformar con un punto. Schlupp igualó en el 53' después de recoger un balón muerto a la salida de un córner.
Toca hacer borrón y cuenta nueva, aunque no todo puede ponerse en el 'debe' de José Mourinho, ni mucho menos. Es más, el portugués presumía hace escasas fechas de 'números de Champions' desde su llegada: en Liga ha sumado 13 victorias, seis empates y siete derrotas desde su llegada.
Cuando cogió el equipo en la jornada 12, tras el adiós de Pochettino, los 'Spurs' eran decimocuartos con 14 puntos. Estaban a 11 de la Champions... y a sólo tres de la sexta plaza.