Loading AI tools
arquitecto e ingeniero español residente en Suiza (1951-) De Wikipedia, la enciclopedia libre
Santiago Calatrava Valls (Benimámet, 28 de julio de 1951) es un arquitecto, ingeniero civil y escultor español. Entre los premios y reconocimientos que ha recibido destaca el Premio Príncipe de Asturias de las Artes de 1999,[2] los premios Nacional de Arquitectura[3] y Nacional de Ingeniería Civil[4] ambos en 2005 y el Premio Europeo de Arquitectura de 2015.[5] Actualmente, cuenta con oficinas en Nueva York, Doha y Zúrich.[6]
Santiago Calatrava | ||
---|---|---|
Santiago Calatrava en 2010 | ||
Información personal | ||
Nombre en español | Santiago Calatrava Valls | |
Nacimiento |
28 de julio de 1951 (73 años) Benimámet,[1] Valencia, España. | |
Nacionalidad | español | |
Educación | ||
Educado en | ||
Alumno de | Rafael Tamarit Pitarch | |
Información profesional | ||
Ocupación | Escultor, arquitecto, ingeniero estructural, ingeniero civil, ingeniero y conservador-restaurador | |
Área | Arquitectura | |
Movimiento | Arquitectura high-tech | |
Obras notables | Obras representativas | |
Proyectos representativos | Ciudad de las Artes y las Ciencias y auditorio de Tenerife | |
Miembro de | ||
Sitio web | calatrava.com | |
Desde los ocho años estudió en la Escuela de Bellas Artes donde comenzó formalmente su preparación como dibujante y pintor. A los 13 años su familia lo envió a París a través de un programa de intercambio estudiantil. De regreso a Valencia, tras asistir a clases nocturnas en la Escuela de Bellas Artes y Oficios de Burjasot, Santiago Calatrava inició en 1969 la carrera de Arquitectura en la Universidad Politécnica de Valencia, donde se graduó en 1974[7] y realizó un curso de posgrado en urbanismo, siendo discípulo del eminente arquitecto conquense Juan Carlos Jiménez. A continuación, Calatrava, que se interesaba por las grandes obras de los maestros clásicos y que deseaba ampliar su formación, se trasladó en 1975 a Zúrich, donde estudió ingeniería civil en el Instituto Federal de Tecnología, (ETHZ, por sus iniciales en alemán) en el cual se graduó con un doctorado en Ciencias Técnicas con la tesis Acerca de la plegabilidad de las estructuras y ejerció asimismo la actividad docente en 1979.
Le fue concedido el Premio Nacional de Arquitectura del Ministerio de Vivienda correspondiente al año 2005 por su dilatada y prestigiosa carrera profesional.[3]
Finalizada la etapa de estudios, trabajó como profesor auxiliar en el Instituto Federal de Tecnología, donde comenzó a aceptar pequeños encargos y a participar también en concursos de nuevos proyectos. En 1983 le fue adjudicada su primera obra de cierta importancia, la estación de ferrocarril de Stadelhofen, situada junto al centro de Zúrich donde también había establecido su despacho. Al año siguiente, Calatrava diseñó el puente de Bac de Roda en Barcelona que fue el primero que empezó a darle cierto reconocimiento internacional. A este seguirían el puente Lusitania de Mérida (1991), del Alamillo de Sevilla (1992) y el puente de 9 de octubre en Valencia (1995).
En 1989 Calatrava abrió su segundo despacho en París, mientras estaba trabajando en el proyecto de la estación de ferrocarril del Aeropuerto de Lyon llamada estación de Lyon-Saint-Exupéry TGV. Dos años después creó su tercer despacho, esta vez en Valencia, donde trabajaba en un proyecto de grandes dimensiones, la Ciudad de las Artes y de las Ciencias.
En 1992, Calatrava firma la Torre de Comunicaciones de Montjuïc, con ocasión de los Juegos Olímpicos de 1992, y uno de los puentes de la Exposición Universal de Sevilla, el Puente del Alamillo, que une la capital hispalense y la vecina localidad de Camas. En el año 2003 concluyó el edificio del auditorio de Tenerife en la ciudad de Santa Cruz de Tenerife, en su inauguración estuvieron presentes algunos de los diarios más prestigiosos del mundo como The New York Times o Financial Times, entre otros.[8]
En 2009 inauguró el puente Samuel Beckett de Dublín (Irlanda). El puente Samuel Beckett (en inglés Samuel Beckett Bridge) es un puente atirantado,[9] que une Macken Street en el lado sur del río Liffey, con Guild Street y North Wall Quay, en la zona de los Docklands de Dublín.[10]
En 2010 firma el edificio Roundhouse, en la localidad de Suhr, cantón de Aargau (Suiza). En el año 2014, Santiago Calatrava fue seleccionado para realizar el proyecto de reconstrucción de la Iglesia Ortodoxa Griega destruida como consecuencia de los atentados del 11 de septiembre de 2001 en Nueva York.[11] En su diseño, Calatrava se ha inspirado en formas de la iconografía Bizantina, al estilo de Santa Sofía. La iglesia sustituirá a la iglesia de cuatro plantas de principios del siglo XX que fue destruida.[12] En 2016 inauguró el intercambiador de transporte de Nueva York Oculus. Ya en 2003 se le adjudicó la construcción de dicha infraestructura intermodal del 1 World Trade Center, en Nueva York, en la denominada zona cero generada tras los atentados del 11 de septiembre de 2001. El intercambiador combina los transportes de tres medios diferentes: los trenes de cercanías de la Autoridad Portuaria Trans-Hudson, el metro neoyorquino y el enlace ferroviario con el Aeropuerto Internacional John F. Kennedy. Calatrava ha diseñado una estructura de vidrio y acero que tendrá el aspecto, en sus propias palabras, de "un ave liberada por las manos de un niño".
Se le considera un arquitecto especializado en grandes estructuras. Calatrava ha recibido numerosos premios y reconocimientos por su trabajo. Entre ellos destaca el Premio Príncipe de Asturias de las Artes que recibió en 1999.[2] También ha sido nombrado Doctor honoris causa en veinte ocasiones.[1]
Posee influencias de Fernando Higueras, Jørn Utzon, Antoni Gaudí, y las arquitecturas gótica y romana.
Calatrava ha recibido numerosos reconocimientos por su diseño y trabajo de ingeniería, como por ejemplo, por su uso de acero y cemento.[13] En 1998, fue premiado con el Fazlur Khan International Fellowship por la SOM Foundation.[14] En 1990, recibió la "Médaille d'Argent de la Recherche et de la Technique", en París. En 1992, recibió la prestigiosa Gold Medal de la Institution of Structural Engineers. En 1993, el Museum of Modern Art en Nueva York albergó una exhibición de su trabajo llamada “Estructura y Expresión”. En 1998 fue elegido para convertirse en miembro de "Les Arts et Lettres", en París. En 2005 recibió la Gold Medal del Instituto Estadounidense de arquitectos.
En 2005, Calatrava fue premiado con el premio Eugene McDermott por el Council for the Arts del MIT. Es uno de los más apreciados relacionado con las artes en los Estados Unidos.[15]
También es un Miembro Sénior del Design Futures Council.[16]
Calatrava ha recibido un total de veinte títulos universitarios honorarios en reconocimiento por su trabajo. En 2013, fue galardonado con un doctorado honorario por Instituto de Tecnología de Georgia, un premio que ha sido otorgado a un reducido número de personas.[17][18]
Las obras de Calatrava han sido criticadas, fundamentalmente por cuatro motivos:
El trabajo de Calatrava en Bilbao ha sido criticado de poco práctico: el aeropuerto de Bilbao carece de instalaciones óptimas para los viajeros, con una sala de espera a la intemperie en una ciudad muy lluviosa[30] y en el puente Zubizuri las losetas de cristal se rompen con facilidad (en 10 años debieron ser repuestas 600 de ellas, con un coste para el Ayuntamiento de 300 000 euros)[31] y son deslizantes cuando llueve,[32] motivo por el cual varios peatones resbalaron en el mismo a lo largo de los años.[31] En 2007, Calatrava demandó al ayuntamiento de Bilbao[33] por permitir que se construyera una pasarela peatonal de Arata Isozaki y quedase unida con el puente. En una primera instancia se desestimó la denuncia interpuesta contra el Ayuntamiento de Bilbao por vulneración sobre la propiedad intelectual en el puente ZubiZuri al entender que, aunque se ha alterado su obra, el interés público prevalece sobre el derecho de autor.[34] Sin embargo, tras una apelación, en marzo de 2009 la Audiencia Provincial de Vizcaya rectificó el criterio del magistrado de lo Mercantil de Bilbao y falló a favor del demandante, condendando al consistorio a pagar 30 000 € al arquitecto en concepto de indemnización.[35] Dicha cantidad fue donada.[36] La ciudad irlandesa de Dublín cuenta también con un puente de estas mismas características, el Puente de James Joyce, del que no se conoce ningún tipo de incidencia.[cita requerida]
Calatrava, en 1996, fue elegido para la construcción de un puente sobre el Gran Canal de Venecia. Desde que el proyecto fue aprobado numerosos cambios estructurales han sido realizados debido a la inestabilidad mecánica de la estructura y al excesivo peso del puente,[37] el cual podría causar que los márgenes del canal se cayesen. La obra fue parada brevemente al poco de comenzar. En diez años el proyecto ha sido inspeccionado por más de ocho consultoras diferentes y el coste del proyecto ha aumentado más de tres veces del presupuesto original;[38] en 2008 el puente fue terminado y el alcalde decidió no festejar la inauguración debido a la polémica generada durante la construcción.[39]
Otra polémica surgió por el Palacio de Congresos Princesa Letizia construido en Oviedo, ya que contaba con un dispositivo móvil a modo de visera que sin embargo no podrá levantarse por problemas en su mecanismo hidráulico.[40] Este edificio consta de un palacio de congresos, un hotel, un centro comercial y la Consejería de Sanidad del Principado de Asturias. Este dispositivo móvil ha sido implementado con éxito en otros proyectos del arquitecto en Milwaukee y en la Facultad de Innovación, Ciencia y Tecnología de la Universidad Politécnica de Florida, que ha sido recientemente galardonada como Proyecto del Año, en los premios de la revista especializada ENR.[41]
También en Oviedo se proyectaron a finales de 2007 tres torres inclinadas de 130 metros de altura y 39 pisos a la entrada de la ciudad desde el norte, conocidas como las 'trillizas' de Calatrava, aunque posteriormente el alcalde de la ciudad descartó el proyecto por no conseguir el «consenso político ni social necesario».[42]
La crítica más común y generalizada a la obra de Calatrava fue recogida por el diario estadounidense The New York Times en 2009. En sus páginas, se afirmó que los edificios de Calatrava presentan «una preocupante incongruencia entre la extravagancia de su arquitectura y el limitado propósito al que sirve», en referencia a la estación que Calatrava ha diseñado para la zona cero de Nueva York.[43][44] sin adecuarse apenas al entorno en que construye, ni en lo referido a la climatología, ni en lo referido al propio paraje natural o entorno arquitectónico en que va a enmarcarse la nueva construcción. Asimismo, el auditorio de Tenerife ha sido criticado por no ser accesible para discapacitados físicos.[45] En octubre de 2014, Santiago Calatrava respondió a muchas de las críticas realizadas en una entrevista publicada por El País,[46] en la que afirmaba que estaba siendo objeto de una campaña de descrédito con fines electorales. Además, atribuía las críticas recibidas a fallos en la ejecución de las obras y un inadecuado mantenimiento de los edificios y puentes creados por él.
El 9 de agosto de 2006 se produjo el derrumbe del alero del Palacio de Congresos de Oviedo. A raíz de ello, la compañía de seguros Allianz interpuso una demanda contra Calatrava y su equipo. El Tribunal Superior de Justicia de Asturias condenó a los acusados a pagar 3 510 000 euros porque los consideró responsables de un fallo en el sistema de apuntalamiento, el cual no estaría correctamente calculado.[47] Tras presentar recurso, en febrero del 2014 fue condenado de nuevo por la Audiencia provincial de Oviedo, con una cuantía a abonar en esta ocasión de 2 960 000 euros.[48]
En 2012 el Tribunal de Cuentas italiano reclamó 3,4 millones de euros a Santiago Calatrava y los responsables del proyecto del cuarto puente sobre el Gran Canal de Venecia por presentar "patologías crónicas" consecuencia de un diseño defectuoso de la obra.[49] Finalmente, la Corte de Cuentas italiana desestimó la acusación contra Calatrava por considerar que no existían responsabilidades en los retrasos y el coste de la obra.[50]
En 2013, la Generalidad Valenciana plantea emprender también acciones judiciales por los desprendimientos que en diciembre del mismo año se producen en parte del revestimiento cerámico del Palacio de las Artes Reina Sofía. Según publicó El País, el ‘trencadís’ del Palacio de las Artes cayó por el mal uso del adhesivo.[51] Finalmente, por un acuerdo amistoso, el arquitecto y la UTE constructora pagaron las reparaciones necesarias[52] sin llegar a emprender acciones judiciales.[53]
En abril de 2013, Bodegas Ysios demanda a Calatrava y pide 2 millones para arreglar la cubierta de una bodega que diseñó el arquitecto, que tiene goteras y humedades.[54]
Seamless Wikipedia browsing. On steroids.
Every time you click a link to Wikipedia, Wiktionary or Wikiquote in your browser's search results, it will show the modern Wikiwand interface.
Wikiwand extension is a five stars, simple, with minimum permission required to keep your browsing private, safe and transparent.