Alfonso, Miguel, Inma y Mirella, los quintos de Manganeses de la Polvorosa en este 2014, fueron los protagonistas de una fiesta en la que la tradición y el cumplimiento de la legalidad fueron de la mano
Manganeses de la Polvorosa, un pueblo conocido internacionalmente por la polémica surgida en los años 90 sobre su tradición de tirar una cabra desde el campanario, aunque finalmente el animal aterrizaba sobre una lona sin sufrir ningún daño, vuelve a recobrar año a año desde su prohibición en el año 2002, el ambiente festivo de este día de los quintos que pone punto final a las fiestas de San Vicente.
La imaginación de los vecinos, hizo que estas fiestas que parecían condenadas a desaparecer una vez que el centro de atención de las mismas ya no era posible, resurgió en forma de fiesta carnavalera y lo que en su día fue el salto de la cabra ahora es un simulacro con un peluche, seguido de un desfile de carnaval, con cabra incluida, que finaliza con el denominado baile de la cabra.
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